"No quiero ser esclava de mis pasiones, quiero vivirlas, sentirlas, disfrutarlas"

martes, 28 de agosto de 2012

Dia de Playa



   Es mediados de agosto, hace un calor asfixiante, me levanto sudando sobre las sábanas y eso que duermo desnuda, son las ocho, muy temprano, pero es que hace un día tan bonito que parece que me perderé algo si sigo en la cama.
   Me pongo un café mientras buceo por el blog y añado una entrada, la anterior, la de cerrado por vacaciones, necesito desconexión total de mi mundo, de este también, preparo los bártulos de la playa y hago el desayuno para el pequeñajo antes de despertarlo.
   Estoy muy nerviosa porque he quedado con un desconocido en la playa, le llamaré C, le he conocido en una web de contactos, apenas si hemos hablado un poco y hemos visto cuatro fotos en nuestros respectivos perfiles, la verdad es que pinta muy bien, sólo hay una pequeña pega y es que los dos acudimos con nuestros hijos, así que poco puede pasar, pero no importa, sólo vernos, mirarnos, saber que a dos toallas de distancia hay una persona que me desea y que va al menos tan caliente como yo, ya me pone tontina.
   La mar está plana como un plato, la arena es de esa fina que se mete por todas partes, ondea la bandera verde y el cielo sobre nosotros es de un azul intensísimo, un día perfecto.
   Me dices por el chat cual es tu sombrilla y las que tienes al lado y como son calitas pequeñas no tardo nada en localizarte.
   Me instalo pegada a tu toalla y tengo algunos problemas colocando la sombrilla, básicamente el problema es mi poca fuerza, así que sin dudarlo te ofreces a ayudarme y....
   Me la clavas....
   Hasta el fondo....
   Para cabeza, que te embalas...
   Ahora puedo observarte mejor, me rozas sin querer pues estamos muy cerca, y me estremezco.
   Aunque has venido con un grupo de gente te he conocido a la primera, practicas escalada y tienes una espalda que parece la cubierta de un portaaviones.
   Estás buenísimo las fotos no te hacen justicia.
   Unto a mi hijo con crema protectora y le dejo que se vaya al agua, sentada en la toalla cojo el móvil y empezamos a charlar.
   Estás a un metro de mi, te veo por el rabillo del ojo y eso me da mucho morbo.
   Siempre he hecho top less desde que tengo tetas, pienso que algo tan bonito es para lucirlo y aunque hoy me he traído puesta la parte superior del bikini, que mi trabajo me ha costado encontrar uno en el armario que tuviera las dos piezas, acabo de decidir que no quiero marcas en mi piel, así que me lo quito y de la misma excitación mis pezones emergen ya tiesos y duros como antenas.
   Tecleas en tu móvil:
   _ Preciosos pechos a conjunto con el resto del cuerpo.
   _ Muchas gracias, me voy al agua_ te respondo, pues de los nervios y el calor he roto a sudar.
   Al acercarme al agua me invade un olor a alga, a salitre, a mar, de la arena hirviendo paso a la tibia humedad de la orilla, me meto caminando, moviendo el culo por supuesto, noto tus ojos clavados en mi trasero, ni un escalofrío el agua está caliente como caldo, había olvidado lo relajante y placentero que puede ser un baño en el mar, mi pequeño juega a hacer un castillo en la arena, está feliz, radiante, así que cojo carrerilla y me doy un chapuzón, buenísima, deliciosa, mis pechos se han comprimido al mojarse, los acaricio por debajo del agua y mis pezones se endurecen y apuntan al cielo.

                                                                        
   Miro hacia las toallas y te veo entrar en el líquido elemento, avanzo un poco hacia ti, hasta que el agua me llega justo por debajo de los pechos, quiero que los veas, que te excites imaginando que los acaricias, me fijo en ti, tienes un cuerpazo, veo tus hombros anchos y pienso en como será un apretón envolvente, deseo perderme ya en esos brazos y ni siquiera sabemos como suena nuestra voz, es el deseo comunicándose que no necesita palabras, cuerpo con cuerpo, puro, natural, instintivo.
   Llevas a tu hija de la mano, es más pequeña que el mío y tiene puestos los manguitos, así que no se separa de ti.
   Dentro del agua volvemos a acercarnos otra vez a un metro, nuestras miradas son ardientes de deseo.
   Mi hijo coge el disco y se viene al agua, empieza a lanzármelo y una de las veces lo tira muy cerca de ti, así que me acerco a buscarlo y por debajo del agua me coges brevemente por la cintura diciéndome un hola muy bajito, ese primer contacto me derrite y el deseo, ese monstruo que nunca descansa se convierte en obsesión.
   Me quedo cerca de ti, a pesar de que mi hijo me hace gestos para que me aparte un poco pues tiene miedo de darle con el plato de plástico a un desconocido.  En otro de esos lances, el disco vuelve a caer a tu lado, cuando lo cojo te pegas a mi por detrás y noto el bulto de tu bañador durísimo en mi culo y sin dudarlo empujo contra él.
   Contengo unas ganas locas de lanzarme a tu boca, giro la cabeza y miro tus labios, viciosos, pequeños pero carnosos y muy apetecibles, tu hija está cerca flotando ajena a todo mirándose las manos debajo del agua, sorprendida quizás de lo arrugadas que están las yemas de sus dedos, me separo y sigo jugando con mi pequeño y deseando que otra tirada de disco me lleve hacia ti.
   Así pasamos el día entre roces y miradas cómplices, en algún momento hemos podido murmurar unas breves palabras pero nos comunicamos por escrito.
   A las cuatro de la tarde me dices que queda poco para irte que tienes que recoger a un familiar en el aeropuerto, te marchas pero seguimos mensajeándonos por teléfono, te confieso que me gustas y haces lo propio.
   Ha sido un día de playa muy excitante, al llegar a casa mientras me ducho me masturbo pensando en ti, ahora ese deseo ha crecido y se ha convertido en ansia animal, en una bestia salvaje y ya estamos empezando a tramar con vernos otro día sin carabina.

   Lo que ocurrirá con C, os lo contaré en le próximo relato.



 
 

lunes, 13 de agosto de 2012

Vacaciones





  Por fin vacaciones, ha sido un año muy duro, me las merezco, quiero daros las gracias a todos los que me leéis, en el ranking de lectores esta España, pero seguido muy de cerca por Rusia y Alemania, darles las gracias también a Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Bélgica, Venezuela, Mexico, Ecuador, Argentina, Colombia, Perú, Chile y al mundo entero. Gracias a los que comentáis mis relatos, es energía y ganas de seguir para mi.


  Prometo disfrutar mucho este verano y documentarme todo lo que pueda para venir con nuevas y emocionantes historias en septiembre.

  Bueno os dejo con la lectura que me voy a la playa, he quedado con un desconocido
  ¡Que nervios!
  Ya os contaré......