"No quiero ser esclava de mis pasiones, quiero vivirlas, sentirlas, disfrutarlas"

viernes, 21 de diciembre de 2012

Glory Hole




   En cuanto mis ojos se aclimatan a la oscuridad veo aparecer tres miembros que brotan por los agujeros, a cuál más espléndido, a cuál más hermoso...

   Sergio me pregunta verga en mano que cuál de ellos me gusta más, y yo no soy capaz de decidirme por ninguno.

  _Me gustan los tres _le digo

  _Así que los tres, ¡Qué zorra eres! _contesta Sergio mientras continua tocando la zambomba.

  Con la otra mano ya se ha abierto paso por debajo de mi extremada minifalda, comprobando mi humedad...

  _Escoge una _insiste

  Uno de los penes sobresale en tamaño, así que sin pensármelo dos veces lo sujeto con una mano y le pego un lametón, su prepucio es suave y está caliente al tacto de mis labios, el dueño del coloso se apretuja más contra la negra pared horadada casi queriendo traspasarla...

  La situación es muy morbosa, a mi el Glory Hole me pierde, aquí no hay seducción, ni miradas de deseo, ni insinuaciones, se trata del más puro sexo, el gozo por el gozo, anhelar y tener, que ese enchufe que entra a la perfección en mi clavija, lo haga ya, sin más adornos...

  Estoy lamiendo y chupando ese rabo, utilizando todo mi repertorio, pero mi cabeza va por delante de los acontecimientos y ya estoy imaginando como me pego de culo a la pared para que esa polla me penetre, para que me parta en dos sin más dilaciones.

  A veces las otras pollas desaparecen y cuando miro por el agujero huérfano lo que veo es una pupila dilatada, cuando nuestras miradas se encuentran, desaparece el ojo y automáticamente vuelve a emerger la polla...

  Se que al otro lado hay tres hombres deseosos, no saber quienes son, ni como son, me parece muy excitante...

  A veces una mano surge abierta intentando tocarme, pero los agujeros no son tan grandes y queda anclada en el antebrazo moviéndose en el aire, y no me resisto a darle por partes mi cuerpo, acerco mi boca a los dedos, o un pecho, o me doy la vuelta y le dejo que sobe mis nalgas...

  Sergio en un rincón del habitáculo mirándome, le encanta mi juego, se acerca y me susurra al oído que escoja una y le haga una felación hasta el final, que quiere ver el semen derramándose por mis labios...y todo esto me lo cuenta sin dejar de acariciar mi sexo.
  Como soy muy obediente, tomo en mis manos la más grande otra vez y empiezo a chuparla con devoción...

  Oigo jadeos al otro lado, Sergio investigando mi grieta empapada, me penetra con sus dedos y chupo más ansiosa, gimo con la polla en la boca, me encanta cuando mi deseo hace crecer su deseo...veo su cara mirándome y su deseo rebota haciendo crecer el mío y así poco a poco llegamos los dos al limbo.

  Acaricio aquella virilidad, y me la meto en la boca, primero sólo la puntita, deliciosa....
sin darme cuenta cada vez ha ido adentrándose más, con mis labios la recorro entera, y la aprieto fuerte con mi mano, la dureza se intensifica, pensar que soy dueña de su placer en este momento, que lo puedo acelerar o frenar, que puedo seguir chupándolo como un helado hasta que se derrita en mi boca, y sigo ensalivándolo, endureciéndolo, siento las venas del cipote a punto de reventar y acelero el ritmo y lo succiono...y ya está aquí...

  Escucho un gemido al otro lado y del titán mana al fin el elixir mágico, un sabor acre, algo salado que anega mi boca y miro a Sergio con ojos de gatita traviesa mientras dejo que el líquido se derrame por la comisura de mis labios....





Y ya me despido por este año. Felices y eróticas fiestas.
  

1 comentario:

  1. GRAN RELATO.Me encanta ese morbo y nunca probé un glory hole pero gracias a este relato tengo ganas de experimentarlo. Un humedo beso.

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